Sistemas relacionados

En las pasadas discusiones describí más a profundidad los términos de sistema espacial y sistema material en la arquitectura. El sistema espacial nos lleva a entender la organización del espacio en el que vamos a trabajar. Mientras tanto, el sistema material se enfoca en que los materiales se adapten mejor a nuestro diseño. Aunque ambos sistemas están perfectamente relacionados, se refieren a aspectos distintos del proyecto.

Dentro de una obra, la organización del espacio se refiere, precisamente, al sistema espacial. En este podemos ver cómo se distribuyen, relacionan y se configuran los espacios para que respondan a funciones específicas como recorridos o sensaciones. A su vez, involucra aspectos como la proporción, jerarquías de espacios, luces y sombras, y reacciones con el entorno de manera abstracta.

Desde otra perspectiva, el sistema material está compuesto por una serie de materiales que se relacionan cuidadosamente para que puedan responder a las necesidades del contexto geográfico que va a ocupar la construcción. Entre sus características se encuentran: acabados, estructuras, detalles y técnicas constructivas como la prefabricación, mampostería, estructuras metálicas, entre otras. Como vemos, este sistema tiene una dimensión física y tangible que influye en la apariencia y la durabilidad de nuestra obra arquitectónica.

Habiendo discutido más a profundidad los términos de sistema espacial y sistema material, podemos entender mejor que, aunque sí están relacionados, se refieren a distintos aspectos del proyecto. Sin embargo, esto no significa que debamos tratarlos como ideas distantes o ajenas unas de otras. En todo el proceso de diseño y construcción es necesario que sepamos identificarlos y diferenciarlos, pero también que podamos integrar ambos sistemas de forma coherente y funcional.